Reseña de "La música del silencio"

Título: "La música del silencio".

Título original: "The Slow Regard of Silent Things".

Autor: Patrick Rothfuss.

Trilogía: 2.5° - Crónica del asesino de reyes.

Páginas: 145.

La Universidad, el bastión de conocimiento, atrae a las mentes más brillantes, que acuden para aprender los misterios de ciencias como la artificería y la alquimia. Sin embargo, bajo esos edificios y sus concurridas aulas existe un mundo en penumbra, cuya existencia solo unos pocos conocen.

En ese laberinto de túneles antiguos, de salas y habitaciones abandonadas, de escaleras serpenteantes y pasillos semiderruidos vive Auri. Tiempo atrás fue alumna de la Universidad. Ahora cuida de la Subrealidad, para ella un lugar acogedor, maravilloso, en el que podría pasarse la eternidad mirando. Ha aprendido que hay otros misterios que no conviene remover, es mejor dejarlos en paz t a salvo. Ya no se deja engañar por la lógica en la que tanto confían en lo alto: ella sabe reconocer los sutiles peligros y los nombres olvidados que se ocultan bajo la superficie de las cosas.

Antes que todo, ¡feliz Navidad! Espero que hayan pasado una excelente noche y un día muy divertido, rodeados de cariño y amor olvidemos los regalos por ahora, por favor. Disfruten y aprovechen las vacaciones.

Ahora sí, a lo que vinimos. Para cualquier persona que haya leído las reseñas que he hecho en el pasado, mi amor por Patrick Rothfuss no le parecerá algo extraño. Es uno de mis autores favoritos, aunque el problema es que lo único que he leído de él son los dos primeros libros de la trilogía de Crónica del asesino de reyes... Me enamoré de su prosa y de sus personajes, así que ante este libro, me encontré frente a un debate, ¿quería leerlo?

Dejen que me explique. Esta historia corta se centra en Auri, una antigua y misteriosa alumna de la Universidad que forma parte del universo de Kvothe, que en lo particular, siempre me gustó por el misterio que le envolvía, ¿quería develar el secreto? ¿Quería saber más de Auri? 

La verdad es que no, razón por la que resistí leer este libro y lo evité... hasta que la espera por el tercer libro por fin me sobrepasó y lo terminé comprando.

Primero, quiero dedicarle unas palabras a la edición del libro. De esta trilogía, las portadas en español siempre me han gustado, pero la de esta historia corta me ha enamorado, los colores me encantan en conjunto a los detalles de los dibujos de los costados (a pesar de que prefiero el título original y no me convence este). Esto, en conjunto con las ilustraciones de Marc Simonetti que a mi parecer están en perfecta sintonía con la forma narrativa de Rothfuss ha logrado que la maquetación de este libro sea hermosa.

El prólogo del autor inicia con la siguiente frase: Quizá no quieras comprar este libro. 

Esa simple frase me devolvió un poco de esperanza y me llenó de curiosidad. Recordé el comentario de cierto antiguo profesor de lenguaje que tuve, sobre que cuando un autor no te recomendaba comprar su libro, existían dos posibilidades.

1) Era un libro creado para vender. Simple. Aunque casi nunca le permitirían a un libro ser publicado si esta fuese la razón.

2) Que no es un libro comercial. Se desconfía que venda, pero el autor necesitaba escribirlo. Requería sacarse las palabras del interior. 

A rasgos literarios, existen varias personas en el interior de estas páginas; siendo estrictos sobre la lógica, sólo existe Auri. Sin diálogos, sin mayor conflicto, sin necesario nudo argumental. 

Alivio. No quería una copia de la estructura de Kvothe en manos de Auri. Quería a Auri, quería algo de ella al modo de ella.

Esta historia me ha encantado. Porque he sentido. Porque los objetos inanimados de Auri me hacen sentir, me hacen una antítesis de lo que sentí con los otros libros: mientras en los demás me emociono en rojo, de manera visceral y potente, La música del silencio me ha hecho sentir a pasos de bebé, como cuando miras un cuadro de pintura sin saber nada de arte, sólo sabes que sientes algo en la boca del estómago, en colores fríos y que se deslizan con suavidad. Nostálgico

Me gustan estos libros, que no entiendes del todo, que carecen de los factores que nos hacen recitar durante el colegio como necesarios para un libro. Que sale de las manos de su autor porque es necesario, porque debía ser escrito.

El libro incluye una nota final del autor. La verdad es que demoré bastante en leerla, porque quería digerir bien lo que acababa de leer antes de chocar con la realidad (con el autor). Me gustó que Rothfuss haya explicado el porqué de esta historia sin necesariamente justificarse. 

Me gusta leerlo como una conversación, como algo cotidiano que escapa en medio de una tarde cualquiera, que notas algo del hombre detrás de las letras. También me gustó la decisión que tomé de esperar (cofcof porque me había olvidado) como una semana antes de leer esta parte.

  5/5

Así, yo al menos he reafirmado mi amor por la pluma de Patrick Rothfuss. ¿Ustedes?